10 noviembre 2008

ATENCIÒN




Aveces escribo desde esta tribuna, muchas de ellas creyendo que grito al vacío, que por mas ácidas y certeras que sean mis críticas son abstracta al mundo que critico y quiero mejorar. Pero se que ahí están un pequeño y valeroso puñado de lectores que reciben y valoran este humilde aporte de quien escribe para no ser una pieza inicua del mundo que nos ha tocado vivir.


Por ejemplo

Hoy al escribir estas lineas no pude dejar pasar desapercibido la noticia de que el secretario de la Juventud, Franklin Rodríguez, informó a un programa de televisiòn que iniciará un programa con los jóvenes delincuentes de la República Dominicana para cambiar armas de fuego por becas.




Desde el programa moño bonito implementado por Luis Acosta Moreta (el gallo) no había escuchado cosa mas ridícula, populista y descabellada como política oficial. Creo(como buen cristiano) en la redención de las almas, en el arrepentimiento, en la rehabilitación del adicto a las drogas. Pero imagine usted amigo lector a una pintoresca figura de cualquier barrio popular por ejemplo Tony el cojo, Luis quita tenis o mingo machete haciendo cola para retirar su beca de estudio con su herramienta de trabajo en las manos, con la pistola con la cual mató, atracó y puso en zozobra el barrio con sus balas perdidas, pero que además es una evidencia de algún delito y es robada como si fuera poco.
Parece un buen plan si usted no conoce a profundidad este tipo de personaje, que de seguro dejaron la escuela por que la calle era mas atractiva y fácil desde el punto de vista de hacer dinero rápido. Se recuperarian muchas armas de fuego, pero se perderían muchos espacios útiles para jóvenes que si lo necesitan y que no saben como podrán ir a una universidad, colegio o instituto técnico.
Esto es una copia cantinflesca y sombría del plan de cambio de armas por juguetes del empresario dominicano radicado en New York Andrés Mateo. Me imagino ver jóvenes serios a buscar como sea su pistola ilegal para obtener una beca o estos antisociales ofreciendo por un dinerito una pistolita sucia de sabe dios que daño, a aquel que necesite una beca. total mañana el le quita una pistola en su próximo atraco a un policía o a un ciudadano aunque corra la sangre.
Perdonen si en este articulo rayo en un pesimismo elevado al cubo, pero no creo en esta medida, no me parece que esta inserte a nadie al sector productivo, ni pare la violencia que hoy invade como plaga nuestra sociedad. Perdón, mil veces perdón.




1 comentario:

Claudia Agramonte Saba dijo...

no es pesimismo, ES REALISMO!!