SANTO DOMINGO, República Dominicana.- Este 30 de mayo se conmemora en el país el 50 aniversario de la muerte del dictador Rafael Leónidas Trujillo, quien gobernó la República Dominicana durante 31 años y fue asesinado como resultado de una conspiración en 1961.
El tirano llegó al poder en 1930, tras un golpe de Estado contra el gobierno del general Horacio Vásquez, y estableció un régimen totalitario al ponerse al mando del país.
Trujillo, quien no admitía ningún tipo de oposición, contaba con el apoyo de la única organización política legal durante su gobierno: el Partido Dominicano.
El generalísimo empezó a crear un imperio de diferentes empresas controladas por el Estado que servían para su enriquecimiento personal.
Durante su dictadura, Trujillo ordenó la masacre de más de 20.000 haitianos, por cuyo crimen posteriormente acordó indemnizar a Haití por cada bracero muerto, mediante un acuerdo con el entonces presidente de la nación vecina, Stenio Vincent.
Su poder llegó al punto de cambiar el nombre de la capital, Santo Domingo, por Ciudad Trujillo, del mismo modo que renombró también el pico más alto de la nación caribeña, ´´La Pelona Grande´´ (hoy Pico Duarte), convirtiéndolo en Pico Trujillo.
Las represiones llegaron a ser parte de la vida cotidiana de los dominicanos durante el gobierno del Trujillo, o “El jefe” como también era apodado.
El dictador creó el Servicio de Inteligencia Militar (SIM), un organismo que controlaba a todos los ciudadanos a través de una vasta red de ´´soplones´´.
En los últimos años de su gobierno, el régimen fue severamente censurado por líderes de diferentes estados.
El crítico más feroz de “El Jefe”, fue el entonces presidente de Venezuela, Rómulo Betancourt, quien estuvo a punto de perder la vida en un atentado financiado por el mandatario dominicano.
Finalmente, cansados de la represión, el 30 de mayo de 1961 un grupo de siete hombres esperó al general en la carretera que iba de la capital a la ciudad de San Cristóbal, en el sur del país.
Cuando el coche con el jefe del Estado se acercó, los conspiradores abrieron fuego y abatieron al dictador.
De los siete, sólo uno sobrevivió más allá de 1961. Los demás fueron capturados, encarcelados y fusilados.
Estos héroes fueron Modesto Díaz, Salvador Estrella Sadhalá, Antonio de la Maza, Amado García Guerrero, Manuel Cáceres Michel («Tunti»), Juan Tomás Díaz, Roberto Pastoriza, Luis Amiama Tió, Antonio Imbert Barrera, Pedro Livio Cedeño y Huáscar Tejeda.
De estos, el general Antonio Imbert Barrera, de 90 años, es el único superviviente que protagonizó los acontecimientos del 30 de mayo, actualmente se considera un verdadero héroe de la República Dominicana.
La Era de Trujillo (1930-1961), como se conoce ese período en el país, es considerada por muchos como uno de los regímenes más sangrientos de América Latina.
Trujillo ha sido comparado con crueles dictadores del mundo, tales como Francisco Franco, de España y Adolfo Hitler, de Alemania.
Museo de la Resistencia
Este domingo fue inaugurado en el país el Museo de la Resistencia, un organismo creado por el Gobierno para “recopilar, organizar, preservar, investigar y exponer los bienes del patrimonio de la nación, correspondiente a las luchas de los dominicanos contra la dictadura.
Ubicado en la calle Arzobispo Nouel No. 210 de la Zona Colonial, el museo está dedicado a los hombres y mujeres que resistieron, lucharon y defendieron la libertad, la justicia y la dignidad del pueblo dominicano y va dirigido a estudiantes, profesores, policías, militares y al público general.
Versión de Imbert Barrera
El general vitalicio, Imbert Barrera, negó que el grupo que ajustició al dictador tuviera contacto con la Agencia Central de Inteligencia de los Estados Unidos (CIA), como han referido varios historiadores.
El único sobreviviente de los ajusticiadores del tirano dijo que no tiene ningún temor a nada que pueda revelar la CIA respecto a la muerte de Trujillo.
“Acuérdese que eran dos grupos, de ese otro grupo yo ni conocía a nadie, me dicen que el otro grupo era dizque que tenía contacto, yo no puedo decirle que sí ni que no, pero sí tenga la seguridad de que nosotros, los que eliminamos al sátrapa ese, no teníamos que ver ni con CIA, ni con nada”, precisó Imbert Barrera en una conversación vía telefónica.
Según el periodista y escritor Miguel Guerrero, tres días después del atentado en que fue muerto el ´´generalísimo´´, el general Imbert Barrera relató, en un documento que permaneció inédito hasta junio de 1991, la forma en que el tirano fue asesinado.
Guerrero señala que el relato le fue dictado a Liliana Cavagliano, hija de los esposos Mario y Dirse Cavagliano, donde se había refugiado Imbert Barrera, huyendo a la feroz persecución de los agentes de seguridad del régimen.
En el documento escrito a máquina en una hoja de tamaño 8 x 13 el 2 de junio de 1961, la misma noche que se refugió en la residencia de la familia italiana, el veterano militar dejaba claro su posición de ´´seguir luchando hasta la muerte´´, y revelaba detalle de la forma en que se preparó la trama contra el dictador.
Varias agencias internacionales difundieron la información sobre el propósito de la CIA de publicar en su página Web una colección de documentos sobre operaciones encubiertas, muchas de ellas ilegales, que incluyen los planes para asesinar al dictador dominicano, el presidente cubano Fidel Castro, y el general chileno, René Schneider.
El ex secretario de las Fuerzas Armadas se definió como un hombre que no habla mentiras, y ratificó que el grupo que lo acompañó en el complot no tuvo nada que ver con “los gringos”.
“Tengan la seguridad de que yo soy un hombre que no hablo mentiras, nosotros, el grupo de nosotros, Antonio de la Maza, Salvador Estrella, Amado García Guerrero y yo, no teníamos nada, nada que ver con los gringos”, agregó. Dijo que una muestra de lo que afirma es que cuando llegó con el cadáver de Trujillo a la casa de Juan Tomás Díaz, allí no había nadie.
Dijo que con su participación en la eliminación del tirano contribuyó a que el país viva hoy en democracia.
Actos conmemorativos 30 de mayo
Esta fecha histórica para los dominicanos es conmemorada en el país con diversos actos, en los que la Comisión de Efemérides Patrias y diversas instituciones recuerdan hoy con varias actividades ese hecho que marcó a los dominicanos y que culminó con el ajusticiamiento del tirano, el 30 de mayo de 1961.
El director de Efemérides Patrias, Juan Daniel Balcácer, informó que a las 5:30 de la tarde está programado un acto de tributo a la gesta heroica del ajusticiamiento del dictador, en el Monumento a los Héroes del 30 de Mayo.
Balcácer consideró que aún falta examinar aspectos de la dictadura en el país con la objetividad que demandan los enfoques históricos, cuando los acontecimientos han ocurrido 50 años atrás.